Conxo Capital Mundial da Movida Mental
PARA AQUELLOS A LOS QUE LES GUSTE LA HISTORIA Y LAS HISTORIAS:
Existen unos documentos del año 1752 en los que se describe una hermosa parroquia, de unos 1200 habitantes, casi todos campesinos (aunque nos consta de que también existían en ella por lo menos 5 tratantes de vino) . Allá por 1835, esta parroquia se une a otras 7 parroquias más de sus alrededores, creándose así de manera legítima el Concello de Conxo. Hasta aquí todo va bien. Es a partir de 1846 que empiezan los problemas, ya que el movimiento galeguista propone una unificación de Galicia que implicaba la supresión de municipios periféricos. En el año 48 la Xunta revolucionaria crea un proyecto de anexión del Concello de Conxo a la ciudad de Santiago, pero por su escasa duración no se llega a realizar. Así, Conxo resistió como entidad administrativa independiente hasta el 15 de mayo de 1925.
Estos son los hechos hidtóricos objetivos, pero la historia no acaba aquí. ¿Por qué más de 80 años después de la anexión de Conxo a Santiago se sigue escuchando la consigna "Conxo Ceive" (Conxo libre) ? Conxo es sin duda un lugar particular. Nuestra fama más inmediata se debe al hospital psiquiátrico que albergamos , que proporciona a nuestras calles una gran concentración de los mal llamados locos, que no son sino genios incomprendidos. Además contamos con un centro sociocultural que se esfuerza hasta sus límites para competir con la telebasura, con la oferta cultural de Compostela (mucho menos cercana e impersonal) y con los famosos "escachadores" del Milladoiro (un escachador es una persona que basa su vida en contar tremendas y no creíbles trolas). Y en los últimos años habitan y forman nuestro barrio una nueva generación de jóvenes (y mayores de joven espíritu) que no dudan el dejar pintadas tan sonadas ya como "Conxo=Beirut" o "Conxo kapital mundial da movida mental". Este es es espíritu combativo de un barrio que siendo parroquia en el siglo XVIII ya contaba con 2 estancos y tres tabernas, que auguraban la explosión demográfica de garitos pa "tomarlle algo" que se daría en las últimas décadas, y aún hace pocos años que pasaba por debajo de mi casa la folclórica figura del afilador.
Se ha recreado así un sentimiento que creíamos olvidado, que va más allá de lugar de residencia, convirtiendo Conxo en algo más que un simple barrio. Por eso fue tremenda mi sorpresa cuando paseando por la Calle de las huertas de Madrid encontré un restaurante gallego (muy concurrido por cierto), en cuyo escaparate había un gran mapa de Galicia; casi inconscientemente mi vista se fijó en la ciudad de Compostela, y pegado al rótulo que señalaba a esta había otro rótulo bien visible: CONXO.
0 comentarios